De compras

Ir a comprar con Eva es horroroso. Y no es porque sea una mala compradora o insoportable, más bien al contrario. Me he comprado más cosas hoy que en los últimos cuatro meses yo sola. Y eso que no tengo presupuesto para gastar por culpa de la mierda de paro que me ha quedado, pero esa es otra historia...

El caso es que normalmente no me gusta la ropa que hay, ni quepo en ella, así que son dos puntos importantísimos en mi plan para ahorrar. Pero hoy el plan se ha ido a la mierda. Directamente.

Tenía que acompañar a mis padres a concretar el tema del crucero (no paran de intentar encasquetárselo en disiembre) y de paso ir a comprar ropa para mi madre. Pero el día de hoy en Barcelona ha sido horripilante y al final mi madre pensó que lo mejor era que me quedara en casa. Pero ya había quedado con Eva en Barcelona, así que al final cogimos el coche y nos fuimos de cabeza a las tiendas. Ella ha adelgazado más de cinco kilos, así que se merecía un premio que pudiera ver al instante.

Y vaya si se ha premiado. Claro que yo me he premiado a mi misma mucho más... y no sé por qué!!! Porque yo de adelgazar nada de nada! Da igual. Cuatro horas de mirar en Zara y h&m han servido para introducir en mi vida un poco de color (otra cosa será vérmelo puesto!!) y para que acabemos como buenas marujas en A loja do gato prieto comprando vasos, copas, platos y un bol... Nos estamos haciendo mayores...

Aunque también he comprado una parte fundamental de mi vestuario para danza tribal... creo que cuando me lo ponga me dará vergüenza, pero vaya, poco puedo hacer!!