.

21.1.10

Propósitos

Cada año cuando llegan las navidades llega el tiempo de los rituales y los propósitos.. habiendo sido este 2009 un año tan raro la verdad es que la sobrecarga de propósitos debía ser equiparable a la que soportan los teléfonos la noche del 31...
.
Quizás por eso, quizás porque a las doce menos cinco de la noche de fin de año estaba aún jugando a las cartas, esa noche se me olvidó pedirle algo al año nuevo. Nada. Me tomé las uvas, empecé a repartir besos y seguí jugando a cartas...

Sin saber cómo, el día siete de enero, sin intención previa, mi cabeza cambió su chip... no sé cuál llevaba puesto pero realmente estaba ya de lo más pasado, porque la diferencia con el nuevo es considerable. Las cosas han cambiado, no diré que radicalmente, pero han cambiado mucho... no es este el lugar para enumerarlo todo, pero de repente todo cuadra y tiene sentido.. Vuelvo a ser yo!

Toda la Mierda se ha quedado en el 2009 y creedme que había mucha mierda ajena en mi tejado.. siento dejarle el marrón al pobre año, pero no cambio lo que tengo ahora por lo que tenía hace un mes... Sólo han pasado veinte días de este año pero me da la sensación de que han sido muchos más por todo lo que he movido en este tiempo.

Lo mejor de todo es que no busco nada, simplemente me dedico a vivir y a esperar activamente lo que me viene.. que son muchas cosas!!! Estoy a punto para todo y he decidido que me voy a querer mucho, porque a veces se deja eso en manos de los demás y no puede ser. Me quiero y a la mierda quien no le guste, así no va a haber quien me haga daño. Sé que es una cuestión de sentido común, pero a veces el sentido común está de vacaciones y no quiere volver a casa. En mi caso ha estado mucho tiempo fuera, pero eso se acabó... estoy disfrutando, tengo más seguridad en mi misma y muchas ganas de hacer millones de cosas...
.
Este año promete!!!
.

14.1.10

El poder de un pecho

Hoy he visto en vivo y en directo, el tremendo poder e influencia que tiene un pecho en un hombre.. bueno, vale, en un bebé, pero un bebé varón...


Alex estaba distraido, jugando.. su madre ha querido llamar su atención y se ha bajado la camiseta y le he enseñado el pecho, el niño ha dejado lo que tenía entre manos, se lo ha mirado atentamente y se le ha iluminado la cara con una sonrisa enorme..


Hombres!!!!!!!!!

12.1.10

Y caí en la tentación,,,

... tal y como está la cosa intento gastarme lo mínimo posible en cosas que realmente no necesito, así que intentando ser buena y tras ver que comprarme una agenda mona me costaba algo así como 20€, decidí comprarme una revista "femenina" con la que me ahorraba más de 15€ y me hacía con una agenda decente... y claro, ya que estaba allí eché una ojeada a revistas y coleccionables y a mi derecha, llamándome, estaba el cómic de Esther.

He tenido la suerte de "crecer" en una librería/papelería y de tener a mi disposición todos los tebeos habidos y por haber. Cada semana me volvía loca cuando llegaban las revistas y al abrir los paquetes salía un tebeo u otro, daba igual el que fuera: Mortadelo y Filemón, Anacleto Agente Secreto, Las Hermanas Gilda, Zipi y Zape... no me duraban nada!! Pero de todos ellos había dos personajes que eran mis preferidos: SuperLópez y Esther (ya, combinación rara donde las haya, no seré yo quien diga otra cosa).

De SuperLópez me encantaban las referencias que podías encontrar sobre Barcelona (yo había dejado Barcelona para vivir en Villablino) y lo mucho que me hacía reir.. los guiones eran geniales y no me cansaba de leerlo una y otra vez. De Esther supongo que lo que me gustaba era ese aura de sentirse un bicho raro, de insatisfecha con todo, de rebeldía sutil... ahora intuyo que el hecho de haber compartido "edad" también influía...

Al venirnos de León sólo pude traerme conmigo un par de tebeos de la colección Bruguera (joyas femeninas); de SuperLópez nada de nada aunque poco a poco he ido comprándome cosas. Hace un par de años Gemma me regaló el segundo tomo de la recopilación de las aventuras de la pecosa y me quedé con las ganas de tenerlos todos, pero el precio...

Y ayer ahí estaba: el comienzo de todo, el primer tomo por un euro.. y caí, me lo compré y lo devoré al llegar a casa... se quedó en nada y me hizo gracia volver por un momento a la adolescencia.. Seguramente me compraré el segundo, pero no creo que llegue a más, porque con los coleccionables pasa lo que pasa (que acaba saliendo más caro que comprándolo por fuera). Aunque ha sido divertido volver a tener trece años...