La manyana siguiente nos iba a llevar de vuelta al valle y al restaurante donde habiamos comido el dia anterior con Mbarak... a sus amigos les habian contratado para tocar en una boda (agosto es epoca bestial de bodas) y nosotras ibamos a ir con ellos, ya que ademas les iban a entrevistar para la tele...
Asi que nos plantamos alli todos a media manyana y empezaron a sonar los djiembes, las darbukas e incluso mis crotalos.. todo improvisado, entre nosotros, sentados en los sofas tranquilamente.. Cuando dejaron de tocar empezamos con los juegos.. como les gusta jugar!!! Chistes, adivinanzas.. y juegos tontos como el de "el primero que hable paga las bebidas" y ahi les tienes a todos intentando picarnos y picarse entre ellos.. Nos hicieron sentir como si les conocieramos de toda la vida e insisto en que eso no hay manera de pagarlo..
Al mediodia les dejamos.. en broma me decian que si no me quedaba para bailar con ellos mientras tocaban... jolinesssssssssssssss
Cogimos el 4x4 para irnos al desierto: Mbarak, Ahmed y Gemma detras, Joanna y yo delante.. justo ese dia empezaba un festival de musica en el desierto y asi seriamos unos cuantos. Viajamos por carreteras solo posibles para un 4x4 que harian las delicias de mi hermano pequenyo e incluso paramos a tomar un te en la cueva de unos nomadas.. uffff impresionate su vida, en una cueva que es mas pequenya que mi habitacion y sin mas lujo que una radio...
Conseguimos llegar a las 4 de la tarde a las Gargantas del Todra.. IMPRESIONANTES... con unos riachuelos en los que la gente se banyaba o se ponia a fumar shisha... no pudimos comer por la hora, asi que acabamos volviendo al camino para comprar alguna cosa en un super..
Pero lo mejor para mi fue llegar al Sahara, con una pequenya tormenta de arena incluida, con la arena entrando como en olas por la carretera mientras Joanna, Gemma, Ahmed y Mbarak cantaban canciones..
EStoy enamorada del desierto desde pequenya de una manera no muy racional, asi que el momento magico de sentirme dentro de ello es irrepetible..
Por desgracia, el esperar por las pizzas que habiamos encargardo y mi arroz (cosas de ser vegetariana) hizo que llegaramos al festival cuando habia acabado, pero por lo menos la siguiente parte del plan no dependia de nada mas que nosotros..
Y es que esa noche la ibamos a pasar en las dunas... pasamos por partes del desierto que no son de postal, vimos los estragos de la riada de hace unos cuatro anyos y, finalmente, el 4x4 se quedo ahogado en una duna... alli nos quedamos. Plantamos las mantas en el suelo, sacamos los djiembes, la comida, la bebida, las lamparas... cenamos y despues empezamos con la musica.. baile en el desierto, bajo las estrellas... jugamos y nos quedamos en silencio bajo miles de estrellas... la arena fina del desierto, la brisa suave, la oscuridad profunda y las estrellas vigilando..
Asi que nos plantamos alli todos a media manyana y empezaron a sonar los djiembes, las darbukas e incluso mis crotalos.. todo improvisado, entre nosotros, sentados en los sofas tranquilamente.. Cuando dejaron de tocar empezamos con los juegos.. como les gusta jugar!!! Chistes, adivinanzas.. y juegos tontos como el de "el primero que hable paga las bebidas" y ahi les tienes a todos intentando picarnos y picarse entre ellos.. Nos hicieron sentir como si les conocieramos de toda la vida e insisto en que eso no hay manera de pagarlo..
Al mediodia les dejamos.. en broma me decian que si no me quedaba para bailar con ellos mientras tocaban... jolinesssssssssssssss
Cogimos el 4x4 para irnos al desierto: Mbarak, Ahmed y Gemma detras, Joanna y yo delante.. justo ese dia empezaba un festival de musica en el desierto y asi seriamos unos cuantos. Viajamos por carreteras solo posibles para un 4x4 que harian las delicias de mi hermano pequenyo e incluso paramos a tomar un te en la cueva de unos nomadas.. uffff impresionate su vida, en una cueva que es mas pequenya que mi habitacion y sin mas lujo que una radio...
Conseguimos llegar a las 4 de la tarde a las Gargantas del Todra.. IMPRESIONANTES... con unos riachuelos en los que la gente se banyaba o se ponia a fumar shisha... no pudimos comer por la hora, asi que acabamos volviendo al camino para comprar alguna cosa en un super..
Pero lo mejor para mi fue llegar al Sahara, con una pequenya tormenta de arena incluida, con la arena entrando como en olas por la carretera mientras Joanna, Gemma, Ahmed y Mbarak cantaban canciones..
EStoy enamorada del desierto desde pequenya de una manera no muy racional, asi que el momento magico de sentirme dentro de ello es irrepetible..
Por desgracia, el esperar por las pizzas que habiamos encargardo y mi arroz (cosas de ser vegetariana) hizo que llegaramos al festival cuando habia acabado, pero por lo menos la siguiente parte del plan no dependia de nada mas que nosotros..
Y es que esa noche la ibamos a pasar en las dunas... pasamos por partes del desierto que no son de postal, vimos los estragos de la riada de hace unos cuatro anyos y, finalmente, el 4x4 se quedo ahogado en una duna... alli nos quedamos. Plantamos las mantas en el suelo, sacamos los djiembes, la comida, la bebida, las lamparas... cenamos y despues empezamos con la musica.. baile en el desierto, bajo las estrellas... jugamos y nos quedamos en silencio bajo miles de estrellas... la arena fina del desierto, la brisa suave, la oscuridad profunda y las estrellas vigilando..
1 comentari:
¡Qué envidia das! Que te siga saliendo todo tan bien.
Un beso.
Salud y República
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